lunes, 9 de junio de 2008

cerrando los ojos...



Ni una piedra, ni una triste y sola partícula de arena en un mar en calma tras una tormenta. . . Ni siquiera el sol me molesta cuando cierro los ojos.

Respiro la pureza que dejaron tras de sí unos cuantos locos. . . y embarco hacia el centro del oceano, donde más tranquilo el mar descansa; Sóla en calma decido cuando voy a despertar. . .

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sinpalabras

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